play_arrow
Optima97.com Optima 97.7 FM | La Gigante de Nagua
Con la llegada del frío, las ventanas se convierten en el punto más vulnerable de nuestras viviendas. Y si son correderas, el reto es aún mayor. Su sistema de cierre, aunque práctico y estético, no siempre garantiza el mejor aislamiento térmico frente a las bajas temperaturas de los meses de invierno.
Pero tranquilidad, existen soluciones (algunas casi invisibles) que pueden ayudarte a ganar confort térmico dentro de casa sin renunciar al diseño de nuestras ventanas. Además, incluso pueden reducir el impacto de la factura de la luz y un ahorro de combustible mucho mayor.
Aislar no significa renunciar a la estética. De hecho, cada vez más interioristas entienden la eficiencia energética como una extensión natural del diseño, se trata de crear espacios bellos, pero también confortables y sostenibles. Desde pequeños gestos hasta intervenciones más elaboradas, hay muchas formas de mejorar el aislamiento de unas ventanas correderas sin perder su encanto original.
Son el primer paso para frenar las corrientes de aire. Estas tiras autoadhesivas, disponibles en materiales como caucho, silicona o espuma, se aplican fácilmente en el perímetro de las hojas y reducen las filtraciones de aire que se cuelan por los raíles de la ventana. Es una solución sencilla, económica y casi invisible que podemos llevar a cabo nosotros mismos.
Actualmente, existen modelos transparentes o de silicona translúcida que no alteran el diseño original de la ventana. Además, los burletes ayudan también a amortiguar el ruido exterior, un beneficio extra en viviendas urbanas donde el confort acústico es tan importante como el térmico.
Los tejidos son aliados silenciosos del aislamiento. Una buena cortina térmica puede reducir la pérdida de calor hasta en un 15 %, según diversos estudios. El secreto está en elegir un tejido con cierta densidad y un forro técnico que actúe como barrera ante la posible entrada de corrientes de aire por el ribete de la ventana.
Además de su función práctica, las cortinas térmicas aportan una sensación de abrigo visual que transforma la atmósfera de la habitación durante el invierno.
Para quienes buscan una intervención discreta, las láminas aislantes son una opción cada vez más habitual. Se adhieren directamente al vidrio y actúan como un filtro térmico que ayuda a mantener la temperatura interior estable. En su versión transparente son casi imperceptibles, pero también existen modelos decorativos que difuminan la luz y añaden textura al cristal.
El resultad es una mayor eficiencia energética sin obras ni cambios estructurales. Algunos interioristas las combinan con perfiles de aluminio pintado o marcos de madera natural para integrar la solución dentro del conjunto estético de la vivienda.
La tendencia actual apunta a superponer capas: una ligera y otra más densa. Este movimiento responde a una idea tan estética como funcional: vestir la ventana en capas, igual que lo haríamos con nuestra propia ropa en invierno. Se trata de combinar una cortina ligera (habitualmente de lino) con otra más pesada y opaca, confeccionada en terciopelo, lana o tejidos técnicos con propiedades térmicas.
Durante el día, la cortina vaporosa permite que la luz natural inunde la estancia, filtrándola suavemente y aportando una sensación de ligereza. Por la noche, la capa más densa entra en juego y se cierra para retener el calor interior, aportar privacidad y envolver el espacio en una atmósfera más íntima y acogedora. Esta superposición de texturas no solo mejora el aislamiento térmico, sino que también añade profundidad visual a la decoración.
En salones o dormitorios con ventanales amplios, los paneles japoneses se presentan como una opción versátil y contemporánea. Su sistema de deslizamiento recuerda al de las propias ventanas correderas, por lo que se integran de forma natural. Si se eligen con tejidos gruesos, acolchados o incluso con un núcleo aislante, contribuyen a mantener una temperatura más estable en la estancia. Además, su diseño minimalista encaja perfectamente en interiores modernos o de inspiración nórdica.
Imagen de portada | Bea Rodríguez
En Decoesfera | Aislar paredes para acabar con el frío y la humedad ahora es posible por menos de 9 euros en Leroy Merlin
En Decoesfera | Adiós al frío y a los ruidos: Leroy Merlin tiene la solución para aislar paredes, suelos y techos: reduce el consumo energético un 60%
–
La noticia
Tengo ventanas correderas en casa: ideas para aislarlas del exterior y ahorrar en calefacción este invierno
fue publicada originalmente en
Decoesfera
por
María Lancha
.
Escrito por Redacción Optima
Desarrollado por PMediaLab | Derechos Reservados
Copyright Optima97.com