David Sevilleja, experto en reformas: «Esta es la mejor opción a elegir entre bañera o ducha, son mucho más seguras y antideslizantes»

La reforma del baño plantea siempre una de las dudas más frecuentes: ¿ponemos bañera o ducha de obra? Aunque ambas opciones cuentan con ventajas propias, la elección final depende de las necesidades de cada persona, del espacio disponible en el baño y del estilo final que se desee conseguir.

La bañera continúa siendo la opción preferida para quienes buscan momentos de relajación y disfrutan de baños largos. Es especialmente práctica en hogares con niños pequeños, donde su uso diario resulta cómodo y funcional. 

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No obstante, David Sevilleja (@todosobrereformas) recuerda que la bañera presenta algunas limitaciones: ocupa más metros cuadrados, consume una mayor cantidad de agua y su acceso puede resultar complicado para personas mayores o con movilidad reducida.

¿Bañera o ducha de obra?

“Las bañeras resbalan más y son menos seguras”, explica el especialista, señalando que el riesgo de caídas es uno de los factores que más se tienen en cuenta en las reformas actuales. Además, estéticamente, “pueden resultar más pesadas visualmente en baños pequeños”.

En cuanto a la ducha de obra, Sevilleja destaca su creciente popularidad gracias a su estética contemporánea y su practicidad. Una ducha de obra se construye generando pendiente en el propio suelo del baño, siempre con una correcta impermeabilización para evitar filtraciones o humedades.

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“Las duchas de obra son mucho más seguras porque incluyen suelos antideslizantes que evitan resbalones”, afirma el experto. Su accesibilidad, al estar a ras de suelo, facilita la entrada y salida, convirtiéndolas en la opción preferida para personas mayores, familias que buscan comodidad o viviendas con espacios reducidos. También suponen un notable ahorro de agua y ofrecen una mayor libertad a la hora de diseñar un baño minimalista y visualmente amplio.

Pese a ello, el experto no descarta la bañera en todos los casos: “Solo la recomiendo si hay niños pequeños, si el espacio es realmente amplio o si a la persona le gusta bañarse». Para el resto de situaciones, la ducha de obra se impone por funcionalidad, seguridad y estética.

La decisión final, asegura el experto, debe partir siempre de las prioridades de cada hogar y del estilo de baño deseado. Pero si se busca eficiencia, comodidad y seguridad, la ducha de obra se consolida hoy como la alternativa más completa.

Fotografía de portada | Bathrooms of Instagram | Vía @todosobrereformas

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María Lancha

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